Diálogo divino.
Iba caminando una noche de verano por un callejón solitario, cuando de repente veo a una figura que caminaba hacia mí. Estaba lejos, pero su forma de caminar era bastante rara, y eso me llamó bastante la atención.
La oscuridad iba disminuyendo a medida que la figura se acercaba, y en un momento, pareció que empezó a brillar. Vestía completamente de blanco, y la capucha no dejaba ver su cara. No supe si era a causa de su "luz", pero parecía bastante mas alta que un humano cualquiera. Decidi seguir caminando para ver qué era.
Una cuadra y media despues, la figura estaba a solamente diez metros de mi, y dejó de caminar. Realmente era más grande que un humano promedio. Media algo así como dos metros y medio, aunque era proporcional a una persona común. Miré para atrás, y cai en la cuenta que estaba completamente solo en ese lugar.
En eso, la mole se decide a sacarse la capucha. Y se le dió por hablar también. Dijo "Hola, soy Dios". Veinticinco minutos después, cuando se me había calmado la risa, volví a mirar al egomaníaco, y estaba más serio que antes, con cara de signo de pregunta. Otros diez minutos de carcajadas.
Resultó ser un egomaníaco paciente, que seguía creyendo que era dios. Me puse a charlar un rato, me habló de su hijo Jesus, de la Biblia, y de tantas cosas que parecía uno de esos flacos que te venden religión a domicilio. Hasta ahí, el tenía menos de Dios que yo de Brad Pitt.
Media hora después ya era aburrido escucharlo y tenía ganas de hacerlo desaparecer. Si no fuera porque era "Dios", era cosa fácil. Me las tuve que ingeniar un poco más. Algo así:
Así fue que me saqué de encima a ese salame, que me hizo perder una hora y diez minutos de vida. La moraleja: Nunca fué al pedo leer la "Guia del autoestopista galáctico" (Hitchhiker's guide to the galaxy, de Douglas Adams.)
La oscuridad iba disminuyendo a medida que la figura se acercaba, y en un momento, pareció que empezó a brillar. Vestía completamente de blanco, y la capucha no dejaba ver su cara. No supe si era a causa de su "luz", pero parecía bastante mas alta que un humano cualquiera. Decidi seguir caminando para ver qué era.
Una cuadra y media despues, la figura estaba a solamente diez metros de mi, y dejó de caminar. Realmente era más grande que un humano promedio. Media algo así como dos metros y medio, aunque era proporcional a una persona común. Miré para atrás, y cai en la cuenta que estaba completamente solo en ese lugar.
En eso, la mole se decide a sacarse la capucha. Y se le dió por hablar también. Dijo "Hola, soy Dios". Veinticinco minutos después, cuando se me había calmado la risa, volví a mirar al egomaníaco, y estaba más serio que antes, con cara de signo de pregunta. Otros diez minutos de carcajadas.
Resultó ser un egomaníaco paciente, que seguía creyendo que era dios. Me puse a charlar un rato, me habló de su hijo Jesus, de la Biblia, y de tantas cosas que parecía uno de esos flacos que te venden religión a domicilio. Hasta ahí, el tenía menos de Dios que yo de Brad Pitt.
Media hora después ya era aburrido escucharlo y tenía ganas de hacerlo desaparecer. Si no fuera porque era "Dios", era cosa fácil. Me las tuve que ingeniar un poco más. Algo así:
- Así que vos sos Dios, que groso.Acto seguido, el bicho desapareció sin hacer nada de ruido.
- Si, eso te dije hace algo más de una hora, y te cagaste de risa.
- Es que... no existís y te me aparecés. Medio ilógico, no te parece?
- Pero no ves que estoy aca? eso demuestra que existo.
- No. Dejá de hablar pelotudeces.
- Bueno, tenes razón. Perdón.
- Ok. Ahora, en que año fue que te hicieron desaparecer con lo de los pescaditos?
- Uhh, ni me hagas acordar de eso, que es doloroso desaparecer en un "soplido de lógica".
- Listo. tenes dos segundos para desaparecer, o cagás fuego de nuevo.
Así fue que me saqué de encima a ese salame, que me hizo perder una hora y diez minutos de vida. La moraleja: Nunca fué al pedo leer la "Guia del autoestopista galáctico" (Hitchhiker's guide to the galaxy, de Douglas Adams.)
Etiquetas: Ficcion
2 Comentarios
"- No. Dejá de hablar pelotudeces.
- Bueno, tenes razón. Perdón."
JAJAJAJAJA. Que hdp. Esta es una típica historia guillelak. Suerte
redundaste con el "bastante" al principio... y lo del pescadito: AJJAJJAJAJAJJAJA "en un soplo de lógica" JAJAJAJJAJA qué recuerdos.. (debería terminar de leer ese libro)