De mitologías contemporáneas. Parte I.

A pesar de las infinitas contradicciones que presupone la existencia de un ser completamente omnipotente y omnisciente (características intrínsecas de la definicion católica de "dios") tenemos cientos de millones de personas que creen ciegamente (o que dicen hacerlo) en dicho ente. Cualquier discusión que se mantenga con un católico respecto a este tema, termina casi irremediablemente en un "Vos sos un boludo, ¿No ves que dios es groso? ¿Cómo queres vos entender algo que es un misterio?" o alguna variante quizás un poco más formal. Resumiendo, termina en un vacío lógico donde influyen factores externos indemostrables y en una agresión.
Basados en un libro que está lleno de contradicciones, de referencias a muertes justificadas por dios, de mentiras demasiado notables y de miles de fallas más, creen tener la justificación de la existencia de un ser que básicamente estaba tan al pedo que un día se le ocurrió crear el mundo. Y no solo eso, sino que además lo idolatran periódicamente, le tienen miedo, le piden favores, y un millón de cosas mas que no vienen al caso. Y como si fuera poco, cualquier charla sobre este tema que se mantiene con un creyente, es tomada por éste como una agresión a su (infundada) religión.
Las pruebas sobran, solo hace falta verlas. El librito al que hice referencia hace rato no soporta un análisis riguroso por más de 2 renglones. La idea de un dios superpoderoso se puede contrarrestar con un par de argumentos que no necesitan tanta elaboración. Las verdades en las cuales se basa ese circo (o religión, como mas te guste) son consideradas como absolutas, cuando cualquier persona se puede dar cuenta que son cien por ciento relativas. Y peor aún, tienen formas de control sobre los que pueden llegar a dudar.
Hasta los mismos predicadores se contradicen casi todo el tiempo. Ni siquiera el mismísimo papa sigue las bases escritas en el susodicho librito al pie de la letra. Ni siquiera le debe importar un carajo.
La peor parte de todo, es que ese mito tiene más poder del que debería tener. Tiene preferencia sobre las otras mitologías similares (al menos en este país), tiene el apoyo de los gobiernos de turno, está metida en el sistema educativo, etc.
Podría escribir infinitos renglones sobre esta porquería, pero ya me da demasiado asco. Yo creo que todo el mundo tiene capacidad de usar su cerebro, asi que por favor les pido que lo hagan. No es mucho trabajo, la verdad, con un poco de análisis crítico de las cosas alcanza.
En fin, quizás no expresé del todo bien mis ideas, pero tenía ganas de escribir sobre esto. No era mi intención hacer un análisis tan exhaustivo del tema, ni de exponer una por una todas las debilidades del mito, porque sinó no termino más.
A modo de aclaración, no estoy solamente en contra de la religión católica, sino de absolutamente todas las que creen en fantasías (existe alguna que no lo haga?). Del resto no hablo todavía, porque no leí suficiente los libritos en los cuales se basan, pero ya le llegará su tiempo.